El caso presenta el desafío de crear la marca de una nueva empresa de software talentosa pero de recursos limitados ubicada en San José, Costa Rica, en la industria de tecnología que cambia rápidamente. Muestra el crecimiento de SPS Software desde su fundación en la cochera del cofundador Claudio Pinto en 1987 hasta la incorporación de varios inversionistas para lanzar y expandir su nuevo software Exactus por toda Latinoamérica.
El crecimiento de la empresa fue el resultado de una estrategia de mercadeo que ofrecía software estandarizado de negocios cuando la mayor parte de los competidores estaba ofreciendo paquetes de software hechos a la medida. La estrategia y persistencia de la empresa le permitieron atraer una variedad de inversionistas para incentivar su drástico crecimiento. La empresa se benefició de una alianza estratégica con una conocida empresa consultora multinacional (KPMG), y más tarde una infusión de efectivo de un inversionista privado de capital de riesgo. La relación con KPMG provocaría más tarde un desconcertante problema para los fundadores de la empresa ya que limitaría el crecimiento adicional de mercado para la ambiciosa empresa nueva.
El caso termina con una conversación entre los fundadores de la empresa y los inversionistas de capital de riesgo con respecto a una infusión de capital por $1 millón que fomentaría más el crecimiento de SPS. Esta sería la primera infusión de capital de riesgo así para una empresa centroamericana si ellos la aceptaban. El equipo gerencial debe crear un plan atractivo de crecimiento para la prometedora empresa nueva de software con el fin de obtener el capital de riesgo.